Ciencias Naturales: LA CÉLULA
La celula es la estructura más pequeña capaz de realizar por sí misma las tres funciones vitales: nutrición, relación y reproducción. Todos los organismos vivos están formados por celulas. Algunos organismos microscópicos, como las bacterias y los protozoos, son unicelulares, lo que significa que están formados por una sola celula. Las plantas, los animales y los hongos son organismos pluricelulares, es decir, están formados por numerosas celulas que actúan de forma coordinada.
Aunque los seres vivos pueden ser muy diferentes unos de otros, sus céluas tienen algunos componentes celulares en común:
La membrana celular: es una películaque limita la célula. A través de ella pueden entrar ciertas sustancias y salir otras.
El citoplasma: es un material gelatinoso que "rellena" la célula. En él se realizan la mayoría de sus funcions vitales.
El material genético: contiene la información sobre cómo será y funcionará cada célula, y se transmite durnte la reproducción a las nuevas células que se forman. En algunos seres vivos, como las bacterias, las células son procariotas y el material genético se encuentra en el citoplasma. En otros, como los animales y las plantas, las células son eucariotas y el material genético está dentro de una estructura llamada núcleo.
El tamaño de las celulas es muy variable. La más pequeña, un tipo de bacteria denominada micoplasma, mide menos de una micra de diámetro. Entre las de mayor tamaño destacan las celulas nerviosas que descienden por el cuello de una jirafa, que pueden alcanzar más de 3 m de longitud. Las celulas humanas presentan también una amplia variedad de tamaños, desde los pequeños glóbulos rojos que miden 0,00076 mm hasta las hepáticas que pueden alcanzar un tamaño diez veces mayor. Aproximadamente 10.000 celulas humanas de tamaño medio tienen el mismo tamaño que la cabeza de un alfiler.
Las celulas presentan una amplia variedad de formas. Las de las plantas tienen, por lo general, forma poligonal. En los seres humanos, las celulas de las capas más superficiales de la piel son planas, mientras que las musculares son largas y delgadas. Algunas celulas nerviosas, con sus prolongaciones delgadas en forma de tentáculos, recuerdan a un pulpo.
En los organismos pluricelulares la forma de la celula está adaptada, por lo general, a su función. Por ejemplo, las celulas planas de la piel forman una capa compacta que protege a los tejidos subyacentes de la invasión de bacterias. Las musculares, delgadas y largas, se contraen rápidamente para mover los huesos. Las numerosas extensiones de una celula nerviosa le permiten conectar con otras celulas nerviosas para enviar y recibir mensajes con rapidez y eficacia.
Los componentes de las celulas son moléculas, estructuras sin vida propia formadas por la unión de átomos. Las moléculas de pequeño tamaño sirven como piezas elementales que se combinan para formar moléculas de mayor tamaño. Las proteínas, los ácidos nucleicos, los carbohidratos y los lípidos son los cuatro tipos principales de moléculas que forman la estructura celular y participan en las funciones celulares.
¿Sabías que…?
El primero en identificar las células en las plantas fue un científico inglés llamado Robert Hook que vivió entre 1635 y 1703 empleando el microscopio. Desde entonces los microscopios y las técnicas para observar cuerpos minúsculos han mejorado mucho y de ese modo los científicos ya pueden decirnos exactamente cuáles son las partes de la célula y las de los átomos. De éstos ya sabemos que están formados a su vez por partículas más pequeñas o subatómicas. Las células tienen cada una de ellas vida independiente, tienen capacidad para crecer cada una por su cuenta y para reproducirse. De hecho hay organismos vivos que constan de una única célula. Para poder cumplir con estas funciones lo que la célula necesita es energía, que obtiene bien del sol, o bien de moléculas en su interior que concentran alimento con alto contenido energético. Hoy se sabe, por ejemplo, que existen numerosas especies animales y vegetales que viven en las profundidades del oceáno a las que no llegan los rayos solares.